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Nuestra carta para un abuelo…¡Súmate!

El mundo de Internet está lleno de gente con ideas maravillosas para hacer la vida un poco más agradable al prójimo. En este caso, mucho más agradable.

Muchas personas mayores pasarán solas estas Navidades, ya sea en residencias o en su propia casa. Sin embargo, esta iniciativa de Adopta un Abuelo, entidad que nos encanta, por cierto, les endulzará un poco estos días.

Se trata de escribirles una carta. Pones tu nombre, tu email y ellos ya se encargan del resto. Le harán llegar la carta a quien más la necesite, así que ¡piensa bien lo que pones!

Desde Alabamos ya hemos escrito una. Nos hemos presentado a nuestro destinatario sorpresa y le hemos invitado a Alabar al Señor con nosotros estas Navidades y todo el año.

Uníos vosotros también a esto, que es una pasada.

Súmate a la iniciativa clicando aquí

Además te compartimos la carta que hemos redactado para que veas una oración que hemos escrito y que en dicha carta figura, espero que te guste. esta oración está disponible al comprar el tríptico. si no quieres comprarlo y la quiere no hay problema, Contáctanos y te la pasamos.

Hola!

Soy Carlos, de Alabamos.
Soy un joven que quiere mucho a sus abuelos. Y se imagina que hay otros abuelos que serán tan buenos y tiernos como los suyos.

¡¡Os merecéis ser queridos!! ¡¡Mucho!!
Comparto esta oración con vosotros qué escribí para la Navidad. Con ella deseo que estemos en comunión y que entiendas, querido abuel@, que si a lo mejor no entro en tu casa físicamente, quiero entrar por esta carta y sacarte una sonrisa, porque la Navidad seguirá siempre siendo alegre a pesar de las circunstancias.

¡Yo este año echaré de menos a mis abuelos y seguro que tu a tu familia! Por ello el que entre en tu casa se merecerá una tierna acogida. Porque acogiéndonos unos a otros acogemos a Jesús que vino aquí por ti y por mi.

Aquí te dejo la oración que viviremos juntos este año. Abriendo nuestras puertas para conocernos!! ¡Podemos hacer una videollamada cuando me contestes! Te presentaré al equipo de Alabamos que nos dedicamos a volver a esos valores cristianos dándole más sentido a la vida en general y a la Navidad en particular.


Acógelo
Si esta noche llaman a tu puerta,
No lo dudes, ábrela. Del otro lado hay una pregunta, una espera, un encuentro.
Si es un extraño, pregúntale qué necesita, si es un amigo, invítale a charlar y si es un conocido tómate el tiempo de acogerlo.
Las casas son más bonitas abiertas, te dirá. Es una forma de dar gracias por la hospitalidad. El huésped no siempre es oportuno y quién sabe si los pastores lo fueron al entrar en el portal.
Estar dispuesto a escuchar para hacerte uno, con el invitado que tiene cosas que contar.
Pon orden en tu hogar para siempre dejar pasar, ten hueco en el armario y un colchón de más. Abrir la casa es abrir el corazón a los demás.
Que Dios bendiga este acogedor hogar y que vengan los reyes, los ángeles y los pastores porque, en este pesebre, aquí, junto a vosotros, Él quiere nacer.
Que Dios bendiga no solo la casa sino los que la habitan y la visitan. Para que reine la paz y la entrega en las cosas sencillas, para que los enfados sean los menos y las alegrías las más.
Él quiere estar donde te levantas y te acuestas, donde te regañas y te abrazas, donde descansas y trabajas.
Bendita sea esta familia que sin ella no habría hogar. Las paredes aíslan del frío invernal y la estufa calienta el salón, pero la verdadera calefacción viene del calor del corazón.
Si esta noche llaman a vuestra puerta;
Sonrisa, abrazo y bienvenida, como si fuera San José buscando lugar donde recostar.
¡Feliz Natividad!

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